En las últimas décadas en la Unión Europea el principio de libertad de establecimiento y de libertad de prestación de servicios ha permitido la movilidad de empresas y personas, así como el aumento de las relaciones entre las personas y los capitales dentro de la UE.

Sin duda, todo esto tiene repercusiones en el tema de los impuestos a pagar sobre los ingresos producidos y la identificación correcta del Estado en el que se deben pagar.

Se consideró el problema de la doble imposición y la injusticia del hecho de que la misma persona pueda estar sujeta al mismo impuesto sobre la renta simultáneamente en dos Países distintos.

En ausencia de un marco regulatorio europeo común y detallado, debe tenerse en cuenta que Italia ha celebrado acuerdos con cada País europeo a lo largo de los años para evitar la doble imposición.

Uno de ellos es España, un País que cuenta con varias relaciones económicas con Italia y en el que la comunidad italiana es realmente numerosa.

Hay muchos italianos que tienen intereses económicos en España, que trabajan allí de forma independiente o subordinada. También, hay muchas empresas que operan en ambos Países.

Existen algunas reglas a seguir para evitar incurrir en la doble imposición o en litigios largos con las autoridades fiscales de Italia y España.

Primero de todo, es importante hacer referencia al “Convenio entre Italia y España para evitar la doble imposición en materia de impuestos sobre la renta y para prevenir la evasión fiscal”, firmado en Roma el 8 de septiembre de 1977, ratificado en Italia con la ley no. 663 del 29 de septiembre de 1980 y publicado en el BOE en España el de 22 de diciembre de 1980.

Este Convenio dicta los principios fundamentales con respecto a los impuestos sobre la renta para las personas físicas y jurídicas y también sobre los ingresos inmobiliarios, las ganancias de las empresas, el trabajo por cuenta propia y el trabajo subordinado y las pensiones.

Además del Convenio de Roma de 1977, que atribuye mucha importancia al País en el que la persona física tiene su residencia y en el que la empresa tiene su sede, se deben considerar las múltiples leyes nacionales y, por lo tanto, cada caso requiere un análisis detallado para encontrar la solución adecuada.

Milano, 19 Junio 2020